Pereira
Un menor casi pierde la vida tras ser víctima de bullying en Pereira
La vida de un menor de 13 años de edad por poco termina después de haber recibido un golpe en la cabeza que, al perecer, le proporcionó otro menor que sería su vecino y compañero de clase y con el que desde hacía algún tiempo se venía registrando un caso de bullying que llegó hasta esta lamentable situación.
La madre del menor víctima de este caso, Sandra Milena Valderrama, mencionó que el adolescente ya había expresado los inconvenientes que tenía con el agresor en diferentes espacios pero no se había hecho nada al respecto, hasta que el pasado 7 de agosto, fue golpeado cerca a su casa ubicada en la comuna Villasantana.
» Mi hijo empezó a discutir con un niño del colegio y fue algo leve a lo cual no le preste mucha atención porque solo eran niños y eran amigos hace mucho tiempo, pero empezaron a pelear por una niña, por tal motivo el adolescente empezó hacerle bullying», manifestó.
Relató también que fue hasta horas después de recibir el golpe, que el menor empezó a presentar otros síntomas, por lo que lo llevó a un centro asistencial donde, según manifesta la madre, la espera generó consecuencias más graves en el cerebro del menor, pues el médico que los atendió, después de casi 5 horas en sala de espera, indicó que no lograría sobrevivir.
» A media noche despertó vomitando, con mucho dolor de cabeza, gritaba y lloraba, decidí llevarlo al Hospital de Kennedy a las 12:30 de la noche, fueron muy negligentes, el médico no quiso atender a mi hijo en ningún momento. Luego de un buen tiempo el niño no abria los ojos, no movía sus brazos y ninguna extremidad de su cuerpo. Ningún médico de turno decidió examinarlo hasta las 4 y media de la mañana que el niño empezó a votar sangre por la nariz y la boca y el médico dijo que tenía un hematoma en el cerebro», explicó.
Sandra Milena también expresó que los acudientes del jóven que agredió a su hijo indicaron que no tenían por qué hacerse cargo de la situación, y por el contrario, han aludido el actuar del menor.
«Los papás del niño no viven con él, pero lo criaron sus abuelos, la respuesta de ellos es, que es un niño y que no tenia la culpa y no le pueden hacer nada. Que era un niño muy berraco por que envió al compañero al hospital. Además solo colaboraron con los medicamentos de mi hijo una sola vez», indicó.
La familia del menor agredido no ha tenido apoyo ni respuesta por parte de las autoridades, por lo que la principal petición, es que se puedan tomar acciones legales a las que haya lugar y que les entreguen los apoyos médicos pertinentes para la recuperación del menor que aún se encuentra hospitalizado en un centro asistencial de la ciudad de Pereira.