Proyecto de la cárcel del Pílamo y sus afectaciones a la comunidad

Esta es la crónica de una obra inconclusa anunciada, así describe el diputado, Durguez Espinosa, el proyecto de construcción de la cárcel del Pílamo en Pereira, un centro penitenciario de mediana seguridad que debió iniciar su ejecución el 18 de febrero de 2019 y concluir en el 2021, pero hoy sigue siendo un proyecto que pareciera no tener fin y tan solo llevaría un 12 % de avance.

Desde hace una década se habla de esta cárcel como una solución urgente para los graves problemas de hacinamiento que registran los centros penitenciarios del departamento y que ahora podría convertirse en un elefante blanco, ya que se han desarrollado acciones populares, informes, interventorías, pero sigue sin ser una realidad.

El diputado Durguez Espinosa, ha indicado que hay problemas de flujo de caja, se presentan afectaciones adicionales en las vías del sector y dificultades en las redes de servicios públicos, además de inseguridad para el lugar y zonas aledañas.

“Es un mamut, yo lo dije hace años, hoy el tiempo nos está dando la razón. No le están pagando a los proveedores y la economía local que gira entorno a esto, se está quebrando, a los empleados no les están pagando, pero no contentos con ello, aquí son 13,5 kilómetros de tubería de 11 pulgadas para llevar agua, en la vía Combia lo están haciendo. Primero, la vía no la están tapando, ese es un reclamo para el contratista porque tienen que garantizarle eso a los risaraldenses; pero también, cuando se habló del tema del agua, la USPEC nos garantizaba que los condominios que estuvieran cerca podrían tomar agua de allí, hoy dijeron no”, indicó el diputado.

¿Quién va a responder por el valor hoy menor de los predios en el sector de la cárcel?, es la pregunta que lanza el corporado, señalando que la inseguridad en la vía se ha incrementado debido al alto tráfico y el deterioro de la carretera que llega hasta el sector donde se está construyendo la cárcel, afectando a toda la comunidad de las zonas aledañas.

Este proyecto tendría un valor cercano a los 1.900 millones de pesos, dineros comprometidos por el USPEC a través del Ministerio del Interior, el terreno fue donado por el departamento y se tendría una capacidad para albergar a por lo menos 1.600 internos. Sin embargo, ya son casi cinco años de retraso en ejecución y por lo menos 12 desde que se empezó a estructurar esta solución.

Otro de los aspectos que denuncia el diputado Espinosa, es que no se hicieron las socializaciones correspondientes a este proyecto que, en medio del proceso, tuvo un contrato para la elaboración de estudios y diseños técnicos con el Consorcio Renacer, tenía un valor cercano a los 2.000 millones de pesos.

Años atrás, nosotros denunciamos en detalle el por qué iba a fracasar, grandes movimientos de tierra y terraplenes, hoy están diciendo que no están moviendo tierra porque está lloviendo, es claro, ellos tenían que haber acondicionado la construcción para que no se afectara por mal clima; ahora le colocan el tema que, por la guerra entre Rusia y Ucrania, seguramente afectará la consecución de algún material. Por todo lado buscan excusa”.

Advierte que, de acuerdo con los procesos fallidos, las acciones inconclusas y el cambio de gobierno, tanto municipal y departamental, como nacional, los recursos restantes planteados para el proyecto no serían entregados a la región y, en consecuencia, la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios – USPEC, no podrá cumplirle a los contratistas con los recursos correspondientes.

“Fue en el gobierno del doctor Botero que se entregó el predio y ahí empezó la tortura, porque la comunidad nunca estuvo de acuerdo, y es que la comunidad de Combia ha sufrido todo, hoy la comunidad de Combia está diciendo – no va más el relleno sanitario – ojo, faltan 10 años pero desde hoy toda la comunidad de Combia ha dicho, no más al relleno sanitario, todas las incomodidades se las han mandado a Combia, para no hablar de las vías que están hoy completamente reventadas y un puente Curtiembres que, en buena hora, el gobernador está sacando adelante, pero hay momentos en que la comunidad de Combia no tienen por dónde transitar”.

La comunidad es, finalmente, la que sufre las consecuencias del alargue, aplazamiento, suspensión, retraso y demás sinónimos para las obras de un proyecto que, por el momento, sigue siendo una historia sin fin.