En Colombia
Padres esconden a su hijo quemado con pólvora para evitar sanciones
Habitantes de Floridablanca, Santander, alertaron a las autoridades de lo que estaba sucediendo en una vivienda del barrio El Reposo, luego de las celebraciones del Año Nuevo. La línea de emergencias recibió la denuncia por los gritos del niño, la Policía llegó hasta la vivienda para hablar con los padres y ellos lo negaron; por eso, fue necesaria una segunda llamada.
En una nueva visita, la Policía de Infancia y Adolescencia logró que la madre del menor de 11 años lo entregara y confesara que el niño se quemó con el estallido de un tote, el pasado 31 de diciembre.
Luego de eso, los uniformados comenzaron un proceso de restablecimiento de derechos y fuera trasladado de urgencia al Hospital Universitario de Santander .
Después de dos días de permanecer escondido por sus padres aguantando el dolor de la lesión, que empeoraba con el tiempo, el niño recibió atención y posteriormente se conoció un reporte sobre lo que le sucedió.
“El niño de 11 años presenta una quemadura a la altura de su ojo izquierdo, producida por un tote que fue arrojado por otro niño con quien quemaba pólvora la noche del 31 de diciembre; y según testigos presenciales del hecho, este al no estallar, es manipulado por el menor afectado, quien segundos después le ocasiona la lesión en su rostro”.
Adicionalmente, la personera de Floridablanca, Margarita Serrano, dijo que la afectación podría ser peor para el menor: “Es muy cruel, el niño puede estar perdiendo su ojo”.