Conecte con nosotros
Banner entérate

Ciencia y tecnología

La NASA quiere congelar el volcán de Yellowstone antes de que acabe con el planeta

Publicado

en

Comparta este artículo

El Parque Nacional de Yellowstone oculta una de las amenazas silenciosas más importantes para la NASA: un súper volcán que no está activo pero que podría acabar con la vida como la conocemos si hiciera erupción.

Se calcula que este súper volcán ha hecho explosión por lo menos en tres ocasiones durante los últimos 2.1 millones de años, es decir, una erupción cada 600,000 años. Lamentablemente para el mundo, la última gran actividad de este súper volcán fue aproximadamente hace 60,000.

Para los científicos de la NASA, este retraso es el momento perfecto para desarrollar una estrategia que neutralice la próxima erupción: para ello, la agencia espacial tiene al menos un plan maestro para éste y todos los súper volcanes que pudieran aparecer.

La premisa principal es congelar el volcán. Esto se lograría a través de la perforación de una serie de pozos alrededor del cráter por los que se bombearía agua fría con el fin de bajar la temperatura del volcán. En teoría, esto crearía un anillo de roca alrededor de la cámara de magma, justo como funciona el anticongelante en el motor de un automóvil.

El plan suena sencillo, pero cada pozo tendría una profundidad de 10 km (lo que los convertiría en las excavaciones más profundas de la historia) y estarían interconectados, lo que daría oportunidad a que se instalara un generador eléctrico.

Si todo llegara a funcionar, Yellowstone se convertiría en la mayor estación geotérmica del mundo y podría proveer electricidad a las comunidades aledañas por siglos. Y así, en su intento de salvar al mundo de una erupción masiva, la NASA podría darnos un mejor lugar para vivir.

A pesar de que la teoría ya esta lista, hay un pequeño problema y es que la NASA no tiene las capacidades técnicas para realizar el plan. Eso y que, de acuerdo a los cálculos de la agencia espacial, se necesitaría tal cantidad de agua que pondría en riesgo la sustentabilidad de la zona, sin contar que, según sus cálculos, tomaría alrededor de 16 mil años para que el volcán se enfriara completamente.

De llevarse a cabo, el plan costaría alrededor de 3,46 mil millones de dólares, el equivalente del 20% del presupuesto anual de la NASA.


Comparta este artículo