En Inglaterra, los empresarios quieren contratar a los presos para trabajar en mano de obra

Productores de carne procesada en el Reino Unido están contratando a presos como trabajadores para cubrir la crisis de mano de obra que se ha producido a raíz del Brexit y la pandemia del coronavirus. La Asociación de Suministradores Independientes de Carne (AIMS, en sus siglas en inglés), que representa a carnicerías, mataderos y procesadores, ha entablado contacto con el Ministerio de Justicia para solicitar una ampliación del número de reclusos con permiso especial de salida para realizar un trabajo remunerado.

El servicio penitenciario inglés facilita la contratación de presos, por lo general tienen la oportunidad de trabajar una jornada por semana, con el salario correspondiente. Pero el mecanismo está desbordado y el cupo de reclusos con permiso de salida para ocupar un puesto de trabajo no cubre las urgentes necesidades del sector.

Solo en el sector alimentario faltan unos 90.000 conductores de vehículos pesados en Reino Unido.